Hola francisco
Te escribo en forma anónima aunque te conozco muy bien. Hoy después de varios meses de descargarlo, leí tu segunda novela. Ya había leído, tu primera novela.
Primero debo decir que me gusta más tu segunda novela. En ella debo resaltar varias cosas positivas. Me gusto la forma como se desarrolla las relaciones con epístolas de los dos jóvenes genios. Lo de cómo sonríe venus y eso me encanto. También me gusto el final y que los protagonistas se encuentren en un aeropuerto. Y finalmente también me gustó, el toque irónico y de sorpresa de Ángel violeta.
En general me gustan las tres tramas, me gusta la forma en la que escribes y narras. Aunque debo decir ciertas cosas que no me gustan, con animo de que mejores.
Como te digo me gustaron las tramas, pero sería bueno que el narrador omnisciente no contara las cosas tan directas, sería mejor que la trama se desarrollara sola y que el espectador descubra e interprete sentimientos y situaciones que pones en boca del narrador. Te explico con varios ejemplos: cuando Rodolfo le dice a Angélica: “Bueno, espero que todo esté bajo control, porque si no es así estarás en problemas; eres una persona muy emocional, te conozco.”. Nada de lo que habías dicho hasta entonces de Angélica hace suponer al lector, que ella es una persona muy emocional. Más bien me parece fría, fuerte, calculadora. Pero el punto es que a los lectores no nos gustan que nos digan tal persona es así, nos gusta que el narrador no los muestre poco a poco, que seamos nosotros los que pensemos, este protagonista es realmente emocional aunque parezca calculador. Cosas como las que te digo, pasan mucho en tu novela. No desarrollas, ni muestras las cualidades de los protagonistas, simplemente el narrador lo afirma y tenemos que creerle, sin prueba de ello.
Otro ejemplo: Cuando Angélica explica los motivos por los que es prostituta, lo dice como un discurso. En ese momento dice: No puedo pagar las cuentas, me gusta mucho el dinero y cosas así. En esta parte, no entendí los motivos de ella. Muchas veces cuando leemos, aunque no nos identificamos con lo que sienten ciertos personajes, si logramos comprenderlos. Pero en este caso no me paso. Y no me paso, por que no sé nada de Angélica, no sé si sufrió privaciones, no sé si un hombre la humillo y quiere ser independiente, no sé si es codiciosa y no lo sé porque hasta ahora lo que me mostraste de ella es que es una mujer muy dedicada al trabajo, perseverante, competitiva y muy solitaria. Pero nada de lo que me muestras de ella me explica porque necesita o quiere más dinero. A los lectores no nos gusta que el narrador nos afirme las cosas, nos gusta descubrirlas, suponerlas, verlas en sus actos. Y lo que nos muestran deben tener relación con lo que pasa. Por ejemplo, sé que es una mujer de aspiraciones, trabajadora y eso no guarda relación con una persona que busque el dinero fácil (si se puede decir eso de la prostitución)
Esto me lleva al segundo punto que no me gusta, tal vez debido al poco desarrollo de ciertos personajes, muchas veces los sucesos resultan inverosímiles. Por ejemplo: cuando Angélica va al apartamento de Rodolfo y le cuenta en seguida que es prostituta. Eso no lo creí, no me imagino que una mujer llegue así sin más a donde otra persona y le suelte una noticia tan fuerte. Si por ejemplo, hubieras planteado con más detalle el conflicto interno que sentía Angélica, al ver a un cliente en su oficina, si hubieras podido mostrar que ella sentía miedo que el contara su verdad en la oficina, si hubieras mostrado, aunque no hubieras explicado las razones de su conflicto, si hubieras mostrado que ella estaba muy sola y que sólo tenia a su trabajo y que necesitaba desesperadamente buscar ayuda o consejo y que finalmente se vio obligada a contarle la verdad a su subalterno y enamorado, hubiera sido más creíble para el lector.
Eso mismo sucede cuando la abogada le cuenta toda su vida al cliente, sin más ni más. Tú sabes que como abogados no vamos contando nuestra vida a los clientes. Si hubieras desarrollado un poco más al personaje y al final ella al sentirse culpable, por que ella también en su momento casi daña un matrimonio… en fin, si hubieras desarrollado más el personaje te hubiera creído que la abogada se abre y confiesa con la clienta.
De igual forma me pasa con la primera trama, con la de Ayea… le falto desarrollo en cuanto a los sentimientos, en cuanto al conflicto interno de la mujer engañada. Los lectores no queremos conversaciones eternas entre psicólogos y pacientes o entre abogados y clientes. Queremos identificarnos, entender lo que sienten los protagonistas. Aunque debo decir que no me disgusto lo que ocurrió en el consultorio del “psicólogo”, me gusto por que mostraba la desesperación que sentía la protagonista. Hubiera sido interesante que mostraras otros estados de animo, que hubieras mostrado las inquietudes de una mujer víctima de la infidelidad, que hubieras mostrado la confusión sobre que hacer ante esa situación. Pero no, tú sentencias las causas de la infidelidad y nadie cuestiona que esas sean las únicas causas para una infidelidad. Ella nunca se cuestiona si ella tiene la culpa y mira que eso siempre pasa. Ella no se cuestiona que va a pasar con su vida, sólo sabemos que ella no ejerce su profesión pero esto para ella no es un conflicto. Ella afirma, mis hijos ya están grandes.. y para ella la unión familiar nunca representa un conflicto. En fin no hay un desarrollo de lo que siente o lo que debería sentir la protagonista. Todos hemos pasado por una desilusión y yo la verdad no me sentí reflejada en tu protagonista. Ella pasa de la ira, tristeza a la certeza de lo que debe hacer, de un momento a otro. Así rápidamente, sin pasar por un proceso.
Como tercer punto pero muy relacionado a los anteriores, pienso que faltaron detalles para crear suspenso y hacer creíble las historias. Sobre Angélica, cuando ella ve a su cliente.. el narrador dice que todas se quedan mirándolo pero este no diferencia entre la sorpresa de Angélica y la fascinación de valentina. No hay nada que me muestre que angélica se sorprende. Y si una prostituta y ejecutiva se encuentra con un cliente… mínimo se desmaya. Ahora nada dijo el narrador de la posible sorpresa o cara de malicia del cliente.
De igual forma, hubiera sido interesante que mostraras algún pequeño síntoma de embarazo de la niña genio en el bus, por ejemplo. No sé mostrar que la niña estaba diferente, que algo le preocupaba, que no dormía bien. (yo supongo que era virgen, porque siempre ha estado enamorada de su amiga) y te cuento que el cuerpo de la mujer cambia, cuando pierde la virginidad… puede haber manchado, dolor, en fin… pero esta niña ni se inmuta con la perdida de su virginidad (ni emocionalmente, ni físicamente). Porque pese a que ella bloquea lo hechos, nada nos muestra que algo le paso en una fiesta o que algo le pasa, hasta que el narrador por arte de magia nos suelta todo de una. Lo de la fiesta, lo de los tragos, lo de la acostada con uno. Y también misteriosamente es en ese momento, cuando le llega un mail a óscar. No hubiera sido mejor que le llegara antes y que no lo hubiera creído o que le hubiera quedado la duda o que estuviera raro con ella por eso?... eso hubiera ayudado al lector a creer la historia.
Ahora, la niña que se enamora en un minuto del niño feo y genio y que lo acosa hasta que logra hacerle el amor en al aire libre, eso resulta inverosímil. Si era feo y sin encanto aparente, como una niña linda se enamora de él a primera vista. No que sus encantos son apreciable, sólo cuando lo conoces muy bien? Cómo que un niño que es un poco acomplejado, tímido, tanto así que no ha tenido nada con la amiga, que le demuestra su amor sin tapujos, es el mismo niño que hace el amor con una desconocida al aire libre? , Porque se acuesta con esa niña? Por despecho?, por curiosidad, porque? Eso falto por ejemplo. Si me dices que al sentirse despechado y engañado, él va donde una niña que siempre ha estado enamorado de él y se acuesta con ella, te lo creo pero no tal y como lo cuentas.
Te recomiendo que combines los tipos de narradores, por ejemplo la primera historia en tercera persona, la segunda historia en primera persona (contada por el hombre) y la tercera historia en tercera historia otra vez. Esto le daría dinamismo y la posibilidad que explores más los sentimientos de algún personaje.
Sigue trabajando, esta vez lo hiciste mucho mejor que la primera.
Mi respuesta:
Te escribo en forma anónima aunque te conozco muy bien. Hoy después de varios meses de descargarlo, leí tu segunda novela. Ya había leído, tu primera novela.
Primero debo decir que me gusta más tu segunda novela. En ella debo resaltar varias cosas positivas. Me gusto la forma como se desarrolla las relaciones con epístolas de los dos jóvenes genios. Lo de cómo sonríe venus y eso me encanto. También me gusto el final y que los protagonistas se encuentren en un aeropuerto. Y finalmente también me gustó, el toque irónico y de sorpresa de Ángel violeta.
En general me gustan las tres tramas, me gusta la forma en la que escribes y narras. Aunque debo decir ciertas cosas que no me gustan, con animo de que mejores.
Como te digo me gustaron las tramas, pero sería bueno que el narrador omnisciente no contara las cosas tan directas, sería mejor que la trama se desarrollara sola y que el espectador descubra e interprete sentimientos y situaciones que pones en boca del narrador. Te explico con varios ejemplos: cuando Rodolfo le dice a Angélica: “Bueno, espero que todo esté bajo control, porque si no es así estarás en problemas; eres una persona muy emocional, te conozco.”. Nada de lo que habías dicho hasta entonces de Angélica hace suponer al lector, que ella es una persona muy emocional. Más bien me parece fría, fuerte, calculadora. Pero el punto es que a los lectores no nos gustan que nos digan tal persona es así, nos gusta que el narrador no los muestre poco a poco, que seamos nosotros los que pensemos, este protagonista es realmente emocional aunque parezca calculador. Cosas como las que te digo, pasan mucho en tu novela. No desarrollas, ni muestras las cualidades de los protagonistas, simplemente el narrador lo afirma y tenemos que creerle, sin prueba de ello.
Otro ejemplo: Cuando Angélica explica los motivos por los que es prostituta, lo dice como un discurso. En ese momento dice: No puedo pagar las cuentas, me gusta mucho el dinero y cosas así. En esta parte, no entendí los motivos de ella. Muchas veces cuando leemos, aunque no nos identificamos con lo que sienten ciertos personajes, si logramos comprenderlos. Pero en este caso no me paso. Y no me paso, por que no sé nada de Angélica, no sé si sufrió privaciones, no sé si un hombre la humillo y quiere ser independiente, no sé si es codiciosa y no lo sé porque hasta ahora lo que me mostraste de ella es que es una mujer muy dedicada al trabajo, perseverante, competitiva y muy solitaria. Pero nada de lo que me muestras de ella me explica porque necesita o quiere más dinero. A los lectores no nos gusta que el narrador nos afirme las cosas, nos gusta descubrirlas, suponerlas, verlas en sus actos. Y lo que nos muestran deben tener relación con lo que pasa. Por ejemplo, sé que es una mujer de aspiraciones, trabajadora y eso no guarda relación con una persona que busque el dinero fácil (si se puede decir eso de la prostitución)
Esto me lleva al segundo punto que no me gusta, tal vez debido al poco desarrollo de ciertos personajes, muchas veces los sucesos resultan inverosímiles. Por ejemplo: cuando Angélica va al apartamento de Rodolfo y le cuenta en seguida que es prostituta. Eso no lo creí, no me imagino que una mujer llegue así sin más a donde otra persona y le suelte una noticia tan fuerte. Si por ejemplo, hubieras planteado con más detalle el conflicto interno que sentía Angélica, al ver a un cliente en su oficina, si hubieras podido mostrar que ella sentía miedo que el contara su verdad en la oficina, si hubieras mostrado, aunque no hubieras explicado las razones de su conflicto, si hubieras mostrado que ella estaba muy sola y que sólo tenia a su trabajo y que necesitaba desesperadamente buscar ayuda o consejo y que finalmente se vio obligada a contarle la verdad a su subalterno y enamorado, hubiera sido más creíble para el lector.
Eso mismo sucede cuando la abogada le cuenta toda su vida al cliente, sin más ni más. Tú sabes que como abogados no vamos contando nuestra vida a los clientes. Si hubieras desarrollado un poco más al personaje y al final ella al sentirse culpable, por que ella también en su momento casi daña un matrimonio… en fin, si hubieras desarrollado más el personaje te hubiera creído que la abogada se abre y confiesa con la clienta.
De igual forma me pasa con la primera trama, con la de Ayea… le falto desarrollo en cuanto a los sentimientos, en cuanto al conflicto interno de la mujer engañada. Los lectores no queremos conversaciones eternas entre psicólogos y pacientes o entre abogados y clientes. Queremos identificarnos, entender lo que sienten los protagonistas. Aunque debo decir que no me disgusto lo que ocurrió en el consultorio del “psicólogo”, me gusto por que mostraba la desesperación que sentía la protagonista. Hubiera sido interesante que mostraras otros estados de animo, que hubieras mostrado las inquietudes de una mujer víctima de la infidelidad, que hubieras mostrado la confusión sobre que hacer ante esa situación. Pero no, tú sentencias las causas de la infidelidad y nadie cuestiona que esas sean las únicas causas para una infidelidad. Ella nunca se cuestiona si ella tiene la culpa y mira que eso siempre pasa. Ella no se cuestiona que va a pasar con su vida, sólo sabemos que ella no ejerce su profesión pero esto para ella no es un conflicto. Ella afirma, mis hijos ya están grandes.. y para ella la unión familiar nunca representa un conflicto. En fin no hay un desarrollo de lo que siente o lo que debería sentir la protagonista. Todos hemos pasado por una desilusión y yo la verdad no me sentí reflejada en tu protagonista. Ella pasa de la ira, tristeza a la certeza de lo que debe hacer, de un momento a otro. Así rápidamente, sin pasar por un proceso.
Como tercer punto pero muy relacionado a los anteriores, pienso que faltaron detalles para crear suspenso y hacer creíble las historias. Sobre Angélica, cuando ella ve a su cliente.. el narrador dice que todas se quedan mirándolo pero este no diferencia entre la sorpresa de Angélica y la fascinación de valentina. No hay nada que me muestre que angélica se sorprende. Y si una prostituta y ejecutiva se encuentra con un cliente… mínimo se desmaya. Ahora nada dijo el narrador de la posible sorpresa o cara de malicia del cliente.
De igual forma, hubiera sido interesante que mostraras algún pequeño síntoma de embarazo de la niña genio en el bus, por ejemplo. No sé mostrar que la niña estaba diferente, que algo le preocupaba, que no dormía bien. (yo supongo que era virgen, porque siempre ha estado enamorada de su amiga) y te cuento que el cuerpo de la mujer cambia, cuando pierde la virginidad… puede haber manchado, dolor, en fin… pero esta niña ni se inmuta con la perdida de su virginidad (ni emocionalmente, ni físicamente). Porque pese a que ella bloquea lo hechos, nada nos muestra que algo le paso en una fiesta o que algo le pasa, hasta que el narrador por arte de magia nos suelta todo de una. Lo de la fiesta, lo de los tragos, lo de la acostada con uno. Y también misteriosamente es en ese momento, cuando le llega un mail a óscar. No hubiera sido mejor que le llegara antes y que no lo hubiera creído o que le hubiera quedado la duda o que estuviera raro con ella por eso?... eso hubiera ayudado al lector a creer la historia.
Ahora, la niña que se enamora en un minuto del niño feo y genio y que lo acosa hasta que logra hacerle el amor en al aire libre, eso resulta inverosímil. Si era feo y sin encanto aparente, como una niña linda se enamora de él a primera vista. No que sus encantos son apreciable, sólo cuando lo conoces muy bien? Cómo que un niño que es un poco acomplejado, tímido, tanto así que no ha tenido nada con la amiga, que le demuestra su amor sin tapujos, es el mismo niño que hace el amor con una desconocida al aire libre? , Porque se acuesta con esa niña? Por despecho?, por curiosidad, porque? Eso falto por ejemplo. Si me dices que al sentirse despechado y engañado, él va donde una niña que siempre ha estado enamorado de él y se acuesta con ella, te lo creo pero no tal y como lo cuentas.
Te recomiendo que combines los tipos de narradores, por ejemplo la primera historia en tercera persona, la segunda historia en primera persona (contada por el hombre) y la tercera historia en tercera historia otra vez. Esto le daría dinamismo y la posibilidad que explores más los sentimientos de algún personaje.
Sigue trabajando, esta vez lo hiciste mucho mejor que la primera.
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Mi respuesta:
Hola Camila:
Gracias por tu mensaje. Y aunque enviaste el mensaje anónimamente, ya tengo pistas sobre tu verdadera identidad jajaja.
Eres abogada, bastante juiciosa, y ya te habías leído mi primera novela, y me conoces muy bien. Y vives en Bogotá, porque investigué la dirección IP del mensaje.
Te agradezco por el análisis tan detallado que hiciste de mi segunda novela. Estoy de acuerdo con tus comentarios que básicamente se concentran en la falta de desarrollo de los personajes, la falta de credibilidad o verosimilitud de ciertos hechos, y el punto de vista del narrador.
Estoy completamente de acuerdo contigo. La falta de desarrollo de los personajes tiene que ver con lo extenso del relato. Te pongo un ejemplo, no hay identificación emocional con los personajes de un cuento, por ejemplo, porque los personajes con anónimos prácticamente. Eso ocurre con mi novela, que es prácticamente un cuento extenso. El lector no alcanza a identificarse con los personajes porque el relato es corto, o no muy largo.
Después de 500 páginas, terminas por identificarte con un personaje, o por lo menos lo conoces muy bien. La novela es casi un cuento largo, donde no hay un desarrollo exhaustivo de los personajes. Estoy de acuerdo. Eso tiene que ver con el tipo de literatura que me gusta. Como bien sabes me encanta leer a J.D Salinger, quien era acusado del mismo problema: ser un escritor de cuentos largos, y no de novelas. En lo personal me encanta el estilo de Salinger, y creo que subconscientemente lo sigo sin tratar de imitarlo. Por otro lado, dices que es preferible conocer a los personajes sin tener que aludir a su personalidad directamente. Un estilo que utiliza Santiago Gamboa. No describir a los personajes sino que dejar que ellos se presenten solitos.
Creo que es el ideal. Dejar que los personajes se presenten solitos, sin aludir a que es "malgeniado" o "trabajador", etc. Lo acepto también, pero me encanta presentar a los personajes directamente, para darme una guía personal del mismo. Eso posiblemente sea poco recomendable a la hora de generar un vínculo emocional con el personaje. Pero es un vicio del escritor. Los escritores tenemos vicios a la hora de escribir, ése es uno.
La veracidad o verosimilitud de las situaciones es relativo. A la hora de generar vínculos emocionales es importante, sin embargo, también hay un ingrediente subjetivo por parte del lector a la hora de creer o no el relato. Te pongo un ejemplo, la ciencia ficción, en la que los hechos son inverosímiles, pero que para cierta gente sí generan vínculos emocionales, por ejemplo, "Avatar" o "Star Wars" en el campo del cine. Muchas de las situaciones de la novela son descabelladas, absurdas, sin embargo, quise ponerle un poco de humor al asunto, y por eso recurrí a lo bizarro, a lo extraño, y hasta a lo caricaturezco.
Acepto todas tus críticas. Te cuento que estoy escribiendo la tercera novela, donde estoy refinando todos esos detalles, pero en otros seguirán los mismos vicios, porque son vicios de escritor. Quedo infinitamente agradecido contigo, como siempre. Un abrazo.
Francisco B.
Pd: Publicaré tu mensaje y esta respuesta en el blog de la novela.
Gracias por tu mensaje. Y aunque enviaste el mensaje anónimamente, ya tengo pistas sobre tu verdadera identidad jajaja.
Eres abogada, bastante juiciosa, y ya te habías leído mi primera novela, y me conoces muy bien. Y vives en Bogotá, porque investigué la dirección IP del mensaje.
Te agradezco por el análisis tan detallado que hiciste de mi segunda novela. Estoy de acuerdo con tus comentarios que básicamente se concentran en la falta de desarrollo de los personajes, la falta de credibilidad o verosimilitud de ciertos hechos, y el punto de vista del narrador.
Estoy completamente de acuerdo contigo. La falta de desarrollo de los personajes tiene que ver con lo extenso del relato. Te pongo un ejemplo, no hay identificación emocional con los personajes de un cuento, por ejemplo, porque los personajes con anónimos prácticamente. Eso ocurre con mi novela, que es prácticamente un cuento extenso. El lector no alcanza a identificarse con los personajes porque el relato es corto, o no muy largo.
Después de 500 páginas, terminas por identificarte con un personaje, o por lo menos lo conoces muy bien. La novela es casi un cuento largo, donde no hay un desarrollo exhaustivo de los personajes. Estoy de acuerdo. Eso tiene que ver con el tipo de literatura que me gusta. Como bien sabes me encanta leer a J.D Salinger, quien era acusado del mismo problema: ser un escritor de cuentos largos, y no de novelas. En lo personal me encanta el estilo de Salinger, y creo que subconscientemente lo sigo sin tratar de imitarlo. Por otro lado, dices que es preferible conocer a los personajes sin tener que aludir a su personalidad directamente. Un estilo que utiliza Santiago Gamboa. No describir a los personajes sino que dejar que ellos se presenten solitos.
Creo que es el ideal. Dejar que los personajes se presenten solitos, sin aludir a que es "malgeniado" o "trabajador", etc. Lo acepto también, pero me encanta presentar a los personajes directamente, para darme una guía personal del mismo. Eso posiblemente sea poco recomendable a la hora de generar un vínculo emocional con el personaje. Pero es un vicio del escritor. Los escritores tenemos vicios a la hora de escribir, ése es uno.
La veracidad o verosimilitud de las situaciones es relativo. A la hora de generar vínculos emocionales es importante, sin embargo, también hay un ingrediente subjetivo por parte del lector a la hora de creer o no el relato. Te pongo un ejemplo, la ciencia ficción, en la que los hechos son inverosímiles, pero que para cierta gente sí generan vínculos emocionales, por ejemplo, "Avatar" o "Star Wars" en el campo del cine. Muchas de las situaciones de la novela son descabelladas, absurdas, sin embargo, quise ponerle un poco de humor al asunto, y por eso recurrí a lo bizarro, a lo extraño, y hasta a lo caricaturezco.
Acepto todas tus críticas. Te cuento que estoy escribiendo la tercera novela, donde estoy refinando todos esos detalles, pero en otros seguirán los mismos vicios, porque son vicios de escritor. Quedo infinitamente agradecido contigo, como siempre. Un abrazo.
Francisco B.
Pd: Publicaré tu mensaje y esta respuesta en el blog de la novela.
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